“COMO UNA NOVELA” DE DANIEL PENNAC

 

 HOLA A TODOS:

BUENO POR FIN ME ANIMO A INSERTAR ALGO EN EL BLOG. ESPERO QUE TODOS HAYAMOS REFLEXIONADO SOBRE ESTE TEXTO EN LA MISMA LÍNEA. A VER SI OS GUSTA,. BESOS A TODOS Y FELICES VACACIONES (YO ME VOY AHORA MISMO!!)

1. ¿Cuál es para ti la tesis principal del autor?
   

 
En mi opinión, la tesis principal del autor es que leer es un acto y debemos implicarnos en ese acto. Es decir, no se nos da todo hecho, sino que debemos imaginar todo lo que leemos, es un acto de creación permanente.
 
Por otro lado, aborda el tema de las dificultades de aprendizaje en la lectura restándole importancia a lo que se dice comúnmente en relación a un mal aprendizaje, es decir, a la influencia de la modernidad, de la tecnología, de la televisión, etc. como determinantes de que los adolescentes no lean o lean mal. Propone otras circunstancias posibles que determinan esta situación, como poner a los niños en situaciones de demasiado esfuerzo que hacen que se agoten, en situaciones de fracaso que hacen que su frustración sea cada vez más acusada y tenga cierto temor a leer, etc.
 
Habla del placer de leer. En mi opinión esto es la clave de su tesis. Los padres y maestros, en opinión del autor, se centran en dotar al alumno de las herramientas necesarias para leer y cuantas metodologías sean necesarias para que el niño aprenda. Sin restarle importancia a estos hechos, que en su opinión y en la mía son importantes, también expone que es necesario enseñarle al niño a disfrutar de la lectura, a aprender a leer no porque “hay que leer”, sino para disfrutar leyendo.
 

1. ¿Estaría el autor de acuerdo con la concepción de dificultades de aprendizaje en la lectura que estamos manejando hasta ahora? ¿Por qué?
   

Bueno, esta me pregunta me resulta algo complicada. En general, el texto no es muy explícito con una dificultad de aprendizaje concreta de una persona en particular (nos habla más de un caso pero no concreta demasiado). Quizá esto es lo que yo más he percibido de nuestro trabajo en clase.
 
Sin embargo, este texto se centra más en la dificultad de aprendizaje de la lectura, en general, y de que actualmente, muchos niños y adolescentes no leen. Por este motivo me ha costado encontrar una cierta concordancia.
 
No obstante, tal y como hemos entendido las dificultades de aprendizaje de la lectura en clase, hay ciertos aspectos comunes que me gustaría destacar:
 
-          Es un complejo muy complejo y difícil de automatizar.
-          Hay que hacer numerosos procesos de abstracción.
-          Para leer hay que centrar la atención.
-          Se debe hacer la conversión grafema-fonema (ejemplo de la alegría del niño cuando consigue leer mamá).
-          Leer es una conducta que tenemos que aprender, mientras que el lenguaje es innato.
-          La importancia de la lectura comprensiva.
-          Las dificultades de aprendizaje en la lectura no están causadas por influencias extrínsecas (televisión, videojuegos, modernidad, etc.)
 
En definitiva, hay muchas similitudes entre el autor y lo visto en clase, sin embargo, creo que el autor no se centra en explicitar una dificultad concreta sino que se centra más en la cuestión de enfrentarse a leer y de la constancia del acto. Nosotros en clase, creo que nos hemos dirigido más a concretar en qué consisten las dificultades de aprendizaje en la lectura, cómo diagnosticarlas y sobre qué criterios y cómo actuar en consecuencia. Quizá eso es lo que he hechado de menos en el texto pero, no olvidemos que es una novela.
 

1. ¿Qué elementos introduce a la hora de comprender o evaluar una posible dificultad de lectura? (independientemente de que ésta se reproduzca de manera temprana, 6-9 años, o más tardía, 12 años en adelante).
   

 

Una de las cosas que me ha llamado la atención es cuando en el texto habla de que no nos debemos dejar llevar por el entusiasmo de los niños cuando están aprendiendo a leer y que no se adquiere el gusto por la lectura por el simple hecho de que los niños sepan leer algunas letras o palabras. Esto en palabras del autor, es lo que señala como “lo que un niño comienza por aprender no es la acción, sino el gesto de la acción”.

 

Sin embargo, cuando los niños van a la escuela y comienzan a leer, tienen una determinada evolución biológica, que no es idéntica en todos los casos. Por este motivo, se pueden ir con un ritmo de aprendizaje más elevado o menos, pero tampoco hay que darle excesiva importancia, para no atosigar al niño y no supere su capacidad de esfuerzo.

 

Esto entronca con la posible evaluación de las dificultades de lectura que aparece sutilmente en el texto. Cuando los padres del chico de la novela comienza a presentar algunas dificultades, sus padres se preocupan demasiado. Preguntan a algunos de los padres de la clase de su hijo,, hacen varias consultas a diferentes especialistas, etc. con el resultado de una inesperada serenidad. Simplemente, el niño no iba a su ritmo, eso es todo, su ritmo de aprender a leer era más lento. Aquí el autor, hace una pequeña crítica a los pedagogos, diciendo que les preocupa más que el niño no aprenda porque dudan de ellos mismos, que el niño lleve un ritmo más lento.

 

Respecto a las dos franjas de edad propuestas en la pregunta, el texto las diferencia constantemente. Hace regresiones en el tiempo para comparar una y otra situación. Aparentemente, este niño nació dentro de una familia normal que pretendían fomentar en su hija el hábito de la lectura y ellos mismos se implican en el proceso, leyéndole un cuento cada noche. Al niño le gusta ese momento del día y cada día se lo pide a sus padres. Llega un momento en que a los padres se les agotan las historias y pasan una etapa de “crisis literaria”, aunque recuperan su entusiasmo y lo hacen cada noche.

 

Llega el momento en que el niño entra en la escuela y comienzan a enseñarle letras, sílabas, palabras, etc. en definitiva, está aprendiendo a leer. Ante esa situación, como ven a su hijo muy entusiasmado, no ven necesario seguir motivando a su hijo en el terreno de la lectura a través de esos cuentos. Así que, deciden suprimirlos. Sin embargo, según avanza la historia, nos damos cuenta de que el niño tiene dificultades en la comprensión lectora, se encuentra más desmotivado, cada vez le cuesta más ponerse a leer, etc.

 

Por tanto, yo creo que la clave, en ambas edades, es dotar al niño de los mecanismos necesarios para que aprenda a leer, utilizar diferentes metodologías sino lo hace a la primera, pero hay algo mucho más importante que dice el autor y con lo que estoy de acuerdo: no debemos tomarnos la lectura como un dogma “hay que leer”, sino ser capaces de transmitir la grandeza de la lectura, la cantidad de caminos que nos abre, la cultura que nos ofrece, la intimidad gratuita de la que nos habla el autor, etc.

 

1. ¿Qué entienden los adolescentes que aparecen en el texto por “leer”? ¿Y los adultos? ¿Y tú? ¿Influye nuestra concepción de lo que es “leer” a la lectura? ¿te influye a ti como lector, estudiante, profesor o futuro psicopedagogo?
   

Quizá, la visión de los adolescentes sobre la lectura, sea un poco pesimista bajo mi punto de vista. Es una visión de un chico que parece no estar muy motivado por leer, incluso hace “trampas” para pasar una prueba sobre un libro de casi quinientas páginas.
 
Por otro lado, al final del texto, nos habla de un grupo de adolescentes que han fracasado en otros institutos y, evidentemente, tienen algunas dificultades de aprendizaje, además de su falta de motivación por aprender.
 
Por este motivo, creo que los adolescentes entienden por leer como algo negativo, algo que supone un esfuerzo, algo que obliga a estar atrapado en la habitación con un libro, con la palabra. Y, sobre todo, tienen muy presente que no leen por placer, sino que se aferran al dogma, “hay que leer”.
 
Por el contrario, la visión que se ofrece de los adultos, es la contraria. Ellos ya tienen una posición en la vida y “no necesitan” leer. Por tanto, si leen es por su propio placer. Esto es una de entender. La otra es que en su generación era la época de la descripción, por lo que necesitaban leer y la generación de sus hijos es la visual, la que no hay que hacer ningún esfuerzo por describirla, puesto que ya viene dada.
 
Si me preguntas cuál es mi opinión, creo que algunas de las cosas que no sólo señala el texto, sino que está a la orden del día en la calle, es que muchas de esas argumentaciones son excusas. Ni todos los adolescentes ven sólo la televisión, ni leen todos los días. Yo creo que hay un término medio. Todo en su justa mediada es apropiado porque, en mi opinión, los recursos que ofrece la vida poco a poco, se deben aprovechar. Pero esto no significa que un arte que nos acompaña desde hace mucho tiempo, quede relegado u olvidado. Muy al contrario, pienso que leer debe convertirse en una pasión y se debe de descubrir poco a poco. Evidentemente, para ello la persona debe querer aprender, para poder disfrutar. Pienso que las personas que no aman la lectura, no han encontrado realmente un libro que les haya hecho viajar a un lugar desconocido, no querer que se termine nunca, tener la necesidad de leer, sin embargo, para descubrir el final, etc. Por tanto, yo también animo, al igual que el autor, a enseñarle a los niños y adolescentes que las lectura les va a suponer un bien para ellos mismos, en primer lugar, y por supuesto, un bien para desenvolverse en la sociedad tan competente como la de hoy en día ya que ésta les acercará a las diferentes etapas educativas de la vida y poder acceder a buen puesto del mercado laboral.
 
Sinceramente, pienso que me va a servir mucho este texto para mi futuro trabajo como psicopedagoga. En realidad, me quedo con la idea clave de que la lectura no es un dogma, sino un placer y espero poder transmitir esto a las personas con las que trabaje.
 

1. ¿Qué pregunta se te ocurre que sea pertinente para ti? ¿Alguna conexión más que hayas hecho?
   

 
Me pregunto cómo acabaría la novela en relación a los alumnos que están escuchando a su profesor cómo les lee en voz alta. Me surge cierta curiosidad por saber, cómo podemos trabajar con ese tipo de alumnos que se encuentran en una etapa evolutiva complicada como es la adolescencia y más aún, si han sido expulsados de otros centros por no llegar a unos mínimos exigidos. Aquí me pregunto, ¿qué podemos hacer?
 
Me ha gustado como empieza el profesor leyéndoles un libro en voz alta. Me parece algo original. No les dice, “tenéis que leer”, sino que como a ellos no les gusta leer, será él quien les lea. Me parece una idea muy bonita e innovadora. Los propios alumnos se sorprenden de esa situación, ya que nadie antes había hecho eso. Sin embargo, despierta en los chicos un cierto interés por saber cuántas páginas, tiene, qué cuenta, qué tipo de libro es, etc.
 
Yo creo que aquí vuelve a la tesis que defiende durante todo el texto: no debemos obligar a los alumnos a que lean porque deben leer. Primero hay que fomentar ese gusto, esa inquietud, esa actitud...Si no podemos caer en el error de que entiendan la lectura como un esfuerzo, como una obligación y nunca lleguen a descubrir el verdadero placer que podemos conseguir gracias a ella.  Yo me quedo con esto, que es lo que más me ha gustado del texto.

1 comentario

[ALEJANDRO - 19 de abril de 2006 - 11:05]

Hola

Respecto a la respuesta 2.
Está claro que la concepción de Pennac sobre la lectura es más amplia que la que de momento estamos usando. Tiene que ver con la concepción amplia y restringida de las DA que discutimos los primeros días. Puede que no sea dislexias de una concepción restringida como la que de momento estamos evaluando en clase, pero introduce toda una serie de factores adicionales a tener muy en cuenta cuando trabajemos con niños o adolescentes, o incluso adultos, o simplemente eduquemos. Las conexiones no son directas claro, ahí está tu función conectora.

En la pregunta tres, creo que te refieres en lo importante que es inculcar cierta actitud sobre la lectura, no sólo técnica, sino los elementos de significado asociados a dicha actividad.

La lectura puede ser un dogma, un placer, una diversión, una aventura, un descubrimiento, un suplicio, puede ser mil cosas, dependiendo del contexto en el que se presenta, y el sentido que se le dé. Me alegro si crees que te puede servir la lectura de este texto.

Cómo invitar a alguien a explorar, a interesarse por descubrir algo nuevo, a implicarse por aprender, ah buenas preguntas las que haces al final. Como ves la invitación la puedes coger o no, si no deja de ser una invitación. Es un tema interesante, que nunca acaba.